Compañero Arturo “COCO” Portillo, Hasta la Victoria Siempre!!!!!!!
Nombre: Arturo Edy Portillo
Conocido por: “Coco”
Nació en: San Salvador, el 28 de mayo de 1942
Falleció en: San Salvador, el 11 de abril de 2011.
Su esposa: Vilma
Hijos: Linka Tatiana
Eiffie Lenina
Ludmila
Edy Camilo
Farabundo Arturo.
Mas: 9 nietos y 1 bisnieta.
Arturo Portillo es el nombre que se pronunciaba más en aspectos legales y en tratos formales. ArturoPortillo era, posiblemente, pronunciado por personas que no lo conocieron desde su niñez o en su juventud. Y es que muchas veces algunas personas quedaban preguntándose quién era Arturo Portillo cuando escuchaban el nombre propio por primera vez. Porque el nombre Arturo Portillo através del tiempo se sintetizó y se extendió entre sus amistades y en su camaradería y confianza solamente como Coco. Y en un trato de extremo respeto más de alguno se quedó llamándole “Don Coco”.
Era, el compañero Coco, el luchador social que por casi seis décadas puso su vida a disposición del esfuerzo individual y colectivo por el anhelo de que su querido pueblo salvadoreño concretara los cambios que las distintas generaciones revolucionarias mantuvieron como llama encendida frente a las diversas formas de agresión y de represión implantadas por las dictaduras y las clases dominantes que trataban de eliminar a quienes se atrevían a demandar mejores condiciones de vida y ambiente democrático.
El vivir casi clandestino debido a la permanente persecución por parte del ejército y demás cuerpos represivos, más su responsabilidad familiar lo obligan a salir de El Salvador en el año 1979 junto con su compañera Vilma y sus tres pequeñas hijas Linka Tatiana, Eiffie Lenina y Ludmila. Sus hijos Edy Camilo y Farabundo Arturo nacieron en Los Angeles. Ese año marca la vida del compañero Coco en dos etapas: un poco más del 50% vivido en El Salvador y casi un 50% en Los Angeles. Coco es un ejemplo a seguir en la lucha incesante, pues todas las personas comprometidas con la lucha pueden testimoniar su espíritu inquebrantable y que siempre mantuvo el rumbo ideológico. Porque el rumbo ideológico tiene que ser el que define al ser humano comprometido con la lucha de las causa justas y a ser siempre consecuente con el proceso de transformaciones sociales mediante una actitud disciplinada en el desarrollo de las tareas que se plantean para concretar su ejecución. Porque la disposición permanente para el cumplimiento del trabajo encomendado, asi como mantenerse fiel al rumbo ideológico y el sentimiento de la solidaridad deben ser el sello de cada revolucionario y/o revolucionaria. Características fácilmente identificables en la vida revolucionaria del compañero Coco.
Coco significa una vida dedicada a la lucha del pueblo salvadoreño. Fue en esa transición de su infancia a la adolescencia en que se incorpora a la vida revolucionaria, y es a edad temprana que empieza a ponerse a la par de muchos que también dedicaron su vida completa al movimiento revolucionario como el líder histórico Shafik Jorge Handal. Es, también en edad temprana que conoce los riesgos y los atropellos que soportaron muchos compañeros y muchas compañeras que se comprometieron con la lucha revolucionaria.
Podemos decir que la incorporación de COCO a la lucha revolucionaria fue desde su infancia. En aquel vecindario donde había un local (más clandestino que público) del Partido, empezó por acercarse un muchachito juguetón, de sonrisa permanente, y los líderes de la década de 1950 apreciaron su espíritu de servicio al colaborar con la limpieza del local, para luego asignarle tareas propiamente de riesgo como el correo clandestino. Ese fue el trascendental acceso al conocimiento y la toma de conciencia de la lucha social que afianzó Coco para toda su vida, sumando fidelidad y disciplina a todo el proceso de lucha hasta concretar la victoria del Partido y llegar a ser el Gobierno del Cambio.
Y fue através de las tertulias como conocimos parte de las veces en que Coco fue encarcelado y torturado. Con el dolor y la ira talvez ya superados, y más en forma jocosa le escuchamos relatar: “A mí a los doce años me dio la Guardia (Nacional) la primera verguiada”.
También logramos conocer uno de los momentos más dramáticos de su vida: Cuando junto con el poeta Roque Dalton fue capturado y en una noche fueron llevados a La Puerta del Diablo. Ahí los metieron en sendos sacos de yute (donde era embolsado el fertilizante y luego eran usados para la recolección del algodón), amarraron la boca de los sacos y con el otro extremo del lazo los subieron y amarraron en las ramas de los árboles que estaban en la orilla de un precipicio. Coco nos contó que parte de la tortura era que les decían que después de cortar el lazo y de que ellos fueran “a estrellarse allá abajo” iban a ir a buscar a sus familiares. Sus torturadores los mecían y ellos se balanceaban como péndulos, y en el regreso los esperaban con las puntas de los fusiles para impactarles la espalda, las costillas o el abdomen.
Las capturas y las torturas no doblegaron a COCO. Le ensancharon el compromiso y la disciplina, y la voluntad de trabajar en todo momento. Su repentino fallecimiento nos sorprendió, nos impactó y nos dolerá por siempre. Nos hará falta su entrega y su ejemplo. Se nos adelantó Nos queda la sensación como que sus deseos concretó. Viajó por unos dias a El Salvador, a su tierra, a su país, nuestro país, y a sólo un dia de su regreso a Los Angeles se quedó allá…Hasta la victoria Siempre.
FMLN-Los Angeles
Comisión de Comunicaciones.
7 de mayo de 2011.
Nombre: Arturo Edy Portillo
Conocido por: “Coco”
Nació en: San Salvador, el 28 de mayo de 1942
Falleció en: San Salvador, el 11 de abril de 2011.
Su esposa: Vilma
Hijos: Linka Tatiana
Eiffie Lenina
Ludmila
Edy Camilo
Farabundo Arturo.
Mas: 9 nietos y 1 bisnieta.
Arturo Portillo es el nombre que se pronunciaba más en aspectos legales y en tratos formales. ArturoPortillo era, posiblemente, pronunciado por personas que no lo conocieron desde su niñez o en su juventud. Y es que muchas veces algunas personas quedaban preguntándose quién era Arturo Portillo cuando escuchaban el nombre propio por primera vez. Porque el nombre Arturo Portillo através del tiempo se sintetizó y se extendió entre sus amistades y en su camaradería y confianza solamente como Coco. Y en un trato de extremo respeto más de alguno se quedó llamándole “Don Coco”.
Era, el compañero Coco, el luchador social que por casi seis décadas puso su vida a disposición del esfuerzo individual y colectivo por el anhelo de que su querido pueblo salvadoreño concretara los cambios que las distintas generaciones revolucionarias mantuvieron como llama encendida frente a las diversas formas de agresión y de represión implantadas por las dictaduras y las clases dominantes que trataban de eliminar a quienes se atrevían a demandar mejores condiciones de vida y ambiente democrático.
El vivir casi clandestino debido a la permanente persecución por parte del ejército y demás cuerpos represivos, más su responsabilidad familiar lo obligan a salir de El Salvador en el año 1979 junto con su compañera Vilma y sus tres pequeñas hijas Linka Tatiana, Eiffie Lenina y Ludmila. Sus hijos Edy Camilo y Farabundo Arturo nacieron en Los Angeles. Ese año marca la vida del compañero Coco en dos etapas: un poco más del 50% vivido en El Salvador y casi un 50% en Los Angeles. Coco es un ejemplo a seguir en la lucha incesante, pues todas las personas comprometidas con la lucha pueden testimoniar su espíritu inquebrantable y que siempre mantuvo el rumbo ideológico. Porque el rumbo ideológico tiene que ser el que define al ser humano comprometido con la lucha de las causa justas y a ser siempre consecuente con el proceso de transformaciones sociales mediante una actitud disciplinada en el desarrollo de las tareas que se plantean para concretar su ejecución. Porque la disposición permanente para el cumplimiento del trabajo encomendado, asi como mantenerse fiel al rumbo ideológico y el sentimiento de la solidaridad deben ser el sello de cada revolucionario y/o revolucionaria. Características fácilmente identificables en la vida revolucionaria del compañero Coco.
Coco significa una vida dedicada a la lucha del pueblo salvadoreño. Fue en esa transición de su infancia a la adolescencia en que se incorpora a la vida revolucionaria, y es a edad temprana que empieza a ponerse a la par de muchos que también dedicaron su vida completa al movimiento revolucionario como el líder histórico Shafik Jorge Handal. Es, también en edad temprana que conoce los riesgos y los atropellos que soportaron muchos compañeros y muchas compañeras que se comprometieron con la lucha revolucionaria.
Podemos decir que la incorporación de COCO a la lucha revolucionaria fue desde su infancia. En aquel vecindario donde había un local (más clandestino que público) del Partido, empezó por acercarse un muchachito juguetón, de sonrisa permanente, y los líderes de la década de 1950 apreciaron su espíritu de servicio al colaborar con la limpieza del local, para luego asignarle tareas propiamente de riesgo como el correo clandestino. Ese fue el trascendental acceso al conocimiento y la toma de conciencia de la lucha social que afianzó Coco para toda su vida, sumando fidelidad y disciplina a todo el proceso de lucha hasta concretar la victoria del Partido y llegar a ser el Gobierno del Cambio.
Y fue através de las tertulias como conocimos parte de las veces en que Coco fue encarcelado y torturado. Con el dolor y la ira talvez ya superados, y más en forma jocosa le escuchamos relatar: “A mí a los doce años me dio la Guardia (Nacional) la primera verguiada”.
También logramos conocer uno de los momentos más dramáticos de su vida: Cuando junto con el poeta Roque Dalton fue capturado y en una noche fueron llevados a La Puerta del Diablo. Ahí los metieron en sendos sacos de yute (donde era embolsado el fertilizante y luego eran usados para la recolección del algodón), amarraron la boca de los sacos y con el otro extremo del lazo los subieron y amarraron en las ramas de los árboles que estaban en la orilla de un precipicio. Coco nos contó que parte de la tortura era que les decían que después de cortar el lazo y de que ellos fueran “a estrellarse allá abajo” iban a ir a buscar a sus familiares. Sus torturadores los mecían y ellos se balanceaban como péndulos, y en el regreso los esperaban con las puntas de los fusiles para impactarles la espalda, las costillas o el abdomen.
Las capturas y las torturas no doblegaron a COCO. Le ensancharon el compromiso y la disciplina, y la voluntad de trabajar en todo momento. Su repentino fallecimiento nos sorprendió, nos impactó y nos dolerá por siempre. Nos hará falta su entrega y su ejemplo. Se nos adelantó Nos queda la sensación como que sus deseos concretó. Viajó por unos dias a El Salvador, a su tierra, a su país, nuestro país, y a sólo un dia de su regreso a Los Angeles se quedó allá…Hasta la victoria Siempre.
FMLN-Los Angeles
Comisión de Comunicaciones.
7 de mayo de 2011.